El principio de Pareto es una herramienta de gestión ampliamente utilizada en diversas áreas, incluida la gestión de riesgos psicosociales en las empresas. Este principio de Pareto, también conocido como la regla 80/20, que establece que aproximadamente el 80% de los efectos proviene del 20% de las causas.
En el contexto de los riesgos psicosociales en las empresas, el principio de Pareto permite identificar y priorizar los factores que contribuyen en mayor medida a estos riesgos, lo que facilita la toma de decisiones y la asignación de recursos para abordarlos de manera eficiente.
Para utilizar el principio de Pareto en la gestión de riesgos psicosociales, se deben seguir los siguientes pasos:
- Identificación de los riesgos: Es fundamental realizar un análisis exhaustivo de los riesgos psicosociales presentes en la empresa. Estos riesgos pueden incluir el estrés laboral, la carga de trabajo excesiva, la falta de reconocimiento, la falta de apoyo social, el acoso laboral, entre otros.
- Recopilación de datos: Se deben recopilar datos relevantes sobre cada riesgo identificado. Estos datos pueden obtenerse a través de encuestas, entrevistas, registros de salud y seguridad, estadísticas de absentismo, entre otros. Es importante contar con información cuantitativa y cualitativa para una visión completa de los riesgos.
- Clasificación de los riesgos: Una vez recopilados los datos, se procede a clasificar los riesgos identificados en función de su frecuencia e impacto. La frecuencia se refiere a la cantidad de veces que ocurre un riesgo en un período determinado, mientras que el impacto se refiere a la gravedad de las consecuencias asociadas al riesgo.
- Ordenamiento de los datos: Los riesgos se ordenan de mayor a menor frecuencia o impacto, y se calcula el porcentaje acumulativo de cada riesgo en relación con el total. Esto permite determinar cuáles son los riesgos más significativos.
- Representación gráfica: Finalmente, se representa el diagrama de Pareto, donde se muestra en el eje vertical el porcentaje acumulativo de los riesgos y en el eje horizontal se enumeran los riesgos en orden descendente. Se traza una línea que conecta los puntos para visualizar la contribución relativa de cada riesgo.
El principio de Pareto permite a las empresas enfocar sus esfuerzos y recursos en los riesgos más relevantes y prioritarios. Al identificar los factores que causan la mayoría de los problemas psicosociales, las organizaciones pueden implementar acciones preventivas y correctivas más efectivas.
Además, el uso del principio de Pareto fomenta un enfoque basado en datos y evidencias en la gestión de riesgos psicosociales, lo que ayuda a tomar decisiones informadas y a evaluar el impacto de las acciones implementadas.
El principio de Pareto es una valiosa herramienta en la gestión de riesgos psicosociales en las empresas. Permite identificar y priorizar los factores más influyentes, lo que facilita la implementación de medidas preventivas y correctivas efectivas. Al enfocarse en los riesgos más significativos, las organizaciones pueden mejorar el bienestar de los trabajadores.
Aquí os planteamos algunos ejemplos:
Ejemplo 1: Estrés laboral
Un departamento de una empresa ha identificado el estrés laboral como uno de los principales riesgos psicosociales que afecta a sus empleados. Deciden aplicar el diagrama de Pareto para comprender mejor los factores que contribuyen en mayor medida a este problema y tomar medidas adecuadas.
- Identificación de los riesgos: Se realiza un análisis exhaustivo y se identifican diversos factores que pueden contribuir al estrés laboral, como la sobrecarga de trabajo, la falta de control sobre las tareas, la falta de apoyo social y la falta de reconocimiento.
- Recopilación de datos: Se lleva a cabo una encuesta a los empleados para recopilar datos relevantes sobre estos factores. La encuesta incluye preguntas relacionadas con la frecuencia de cada factor y la percepción de su impacto en el estrés laboral.
- Clasificación de los riesgos: Una vez recopilados los datos, se clasifican los factores identificados en función de su frecuencia e impacto. Se descubre que la sobrecarga de trabajo y la falta de control son los factores más frecuentes e impactantes en el estrés laboral.
- Ordenamiento de los datos: Los factores se ordenan en función de su impacto, y se calcula el porcentaje acumulativo de cada factor en relación con el total. Se encuentra que la sobrecarga de trabajo representa el 60% del impacto total, mientras que la falta de control representa el 30%.
- Representación gráfica: Se crea un diagrama de Pareto donde se muestra la contribución relativa de cada factor. La línea conecta los puntos correspondientes a la sobrecarga de trabajo y la falta de control, destacando claramente que estos dos factores son los más significativos en el estrés laboral.
Con esta información, la empresa puede enfocar sus esfuerzos en abordar estos dos factores prioritarios. Pueden implementar medidas como la redistribución de tareas, la promoción de la autonomía y la participación en la toma de decisiones, lo que ayudará a reducir el estrés laboral y mejorar el bienestar de los empleados.
Ejemplo 2: Acoso laboral
En otra empresa, se detectan casos de acoso laboral entre los empleados, lo que genera un ambiente de trabajo negativo y afecta el bienestar y la productividad del personal. Deciden utilizar el diagrama de Pareto para identificar los principales factores que contribuyen a esta problemática.
- Identificación de los riesgos: Se realizan entrevistas y se recopilan informes sobre casos de acoso laboral para identificar los diferentes factores que están contribuyendo a esta situación. Algunos de los factores identificados incluyen la falta de políticas y procedimientos claros para prevenir el acoso, la ausencia de capacitación en sensibilización y prevención, y la falta de mecanismos eficientes para reportar y abordar los casos de acoso.
- Recopilación de datos: Se revisan los registros de recursos humanos y se llevan a cabo entrevistas con los empleados afectados y testigos para obtener datos detallados sobre la frecuencia y el impacto de cada factor identificado.
- Clasificación de los riesgos: Los factores se clasifican en función de su frecuencia e impacto. Se descubre que la falta de políticas y procedimientos claros y la ausencia de capacitación son los factores más frecuentes e impactantes en los casos de acoso laboral.
- Ordenamiento de los datos: Los factores se ordenan según su impacto, y se calcula el porcentaje acumulativo de cada factor en relación con el total. Se encuentra que la falta de políticas y procedimientos claros representa el 50% del impacto total, mientras que la ausencia de capacitación representa el 30%.
- Representación gráfica: Se crea un diagrama de Pareto que visualiza la contribución relativa de cada factor. La línea conecta los puntos correspondientes a la falta de políticas y procedimientos claros y la ausencia de capacitación, destacando así la importancia de estos dos factores en los casos de acoso laboral.
Con esta información, la empresa puede priorizar la implementación de políticas y procedimientos claros para prevenir el acoso laboral y proporcionar capacitación en sensibilización y prevención. Estas acciones ayudarán a crear un entorno de trabajo seguro y respetuoso, y a reducir los casos de acoso laboral en la empresa.
Deja una respuesta